Vemos que muchos ciclistas llevan el casco tan suelto que pierde su eficacia y no protege nuestra cabeza. Entonces, ¿Para qué lo llevamos?
Compartimos 4 recomendaciones para ajustar correctamente el casco, realizadas por Randy Swart, el director del Bicycle Helmet Safety Institute de Arlington, Virginia.

colocar bien el casco

  1.  Coloca el casco en tu cabeza, de manera que esté al mismo nivel delante y detrás, así, si miras hacia arriba no deberías de ver casi el frente. También asegúrate de que el casco está recto y no de lado.
  2. Con el cierre puesto, aprieta la correa a la altura de la barbilla, lo suficiente como para notar que el casco se hunde un poco cuando abres la boca.
  3. La Y de las dos correas debe quedar justo debajo de cada oreja.
  4. Ajusta la ruleta de la parte de detrás de manera que el casco quede ajustado, pero no demasiado apretado. Mueve las cabeza de un lado a otro y comprueba si el casco se mantiene en su sitio o está suelto.

Test final
Una vez colocado perfectamente, empuja la frente del casco hacia arriba y hacia abajo. Si se desplaza más de 3 cm., reajústalo. Ya tienes tu casco preparado para hacer su función: asegurar tu cabeza en caso de golpe o caída en bicicleta.

Recordar que el casco es obligatorio en ciudad y zonas interurbanas para menores de 16 años y en zonas interurbanas para todos los ciclistas.